Thursday, December 03, 2015
El Consell de Barri de Mirasol
EL CONSELL DE BARRI DE MIRASOL
Dedicado a las
mujeres y hombres de Mirasol que llevan años reclamando una piscina pública
Miércoles, 2 de diciembre a las 20h se convoca un Consell de Barri en Mirasol, con la
presencia de unas 40 personas, que han dejado sus ocupaciones diarias para
participar en la cosa pública.
La misma disposición de la sala en el Casal, recuerda al
Pleno Municipal, por un lado y sentados en mesas, los representantes políticos,
asociaciones y entidades, en frente los ciudadanos, el pueblo, los que les
pagamos el sueldo con un IBI abusivo que no aportan ni los servicios básicos de
limpieza, los que haciendo un esfuerzo, desafiando el frío y renunciando al
fútbol, nos acercamos para hablar, proponer ideas, presentar reclamaciones,
quejas, ser informados, en definitiva para participar en el gobierno de nuestro
barrio, de nuestra ciudad, al más puro estilo clásico de la democracia
inventada por los griegos.
Hablan de “democracia
participativa” cuando todos sabemos que si es democracia tiene que ser
participativa y si no hay participación no es democracia. ¡Y son regidores!
El mismo funcionamiento del Consell aburre hasta a las ovejas. Largos parlamentos, inútiles,
sosos, reiterativos, que no aportan solución alguna a los problemas que ignoran,
para justificar lo injustificable. Parece que estén en otro mundo.
“Se pone el contador a
cero” resulta que los planes presentados en el último Consell que han
costado mucho dinero elaborarlos, ahora no cuentan, que lo volvemos a mirar todo de nuevo, que antes no estábamos… ¿es
decir habrá que pagar de nuevo a alguien? Y casi toda la oposición calla.
Me pone triste y de muy mala leche, ver a señoras mayores,
luchadoras de Mirasol, que llevan
años y años reclamando una piscina pública, desde al menos el 2003, casi
resignarse estoicamente ante un nuevo aplazamiento. No se merecen esta tomadura
de pelo, este engaño, tanta ineficacia e indecencia.
No han hecho más que
pagar estudios e informes, planes que ahora no sirven, pero por el camino se han
gastado más de 135.000 euros, vean la información que publicó EL PAÍS:
Un Consell que no entró nunca en el debate abierto de los
temas de corrupción, ni en la larga lista de reivindicaciones que se llevan
años planteando y que ahora al cabo de seis meses de comenzar la legislatura,
vuelve a ponerse a cero el contador. ¿Pero qué es esto, nos tomáis por tontos?
Un desastre tan grande de desgobierno como el que nunca he
visto en Sant Cugat, o estos nuevos políticos demuestran con hechos que son
capaces de aportar soluciones o dudo mucho que repitan en sus cargos.
Convergencia que se transforma, renunciando a su fundador, no tiene mayoría en Sant Cugat y ERC recogerá
muchos de sus votos, si siguen con esta mala política inoperante.
No hay coherencia en política cuando se vota en el Pleno
Municipal por la Independencia y 20 farolas llevan dos años sin iluminar la
entrada a Mirasol, se alega que es culpa del Ministerio de Fomento, como
siempre los problemas son de Madrid, ¿ustedes para que están y qué hacen?.
Un político independentista lo es con hechos y no por firmar
declaraciones que son un brindis al sol. Lo es cuando se compromete y ejecuta
una buena política local al servicio de los ciudadanos, que le pagan su sueldo,
deben demostrar que la independencia nos aporta valor, también cuando se trata
de iluminar la entrada a tu ciudad.
Y uno se queda
pensando, si estos que viven aquí y nada hacen cuando ven un problema como el
#puntonegro o la falta de iluminación ¿qué harán cuándo no tengan a Madrid para
culpabilizarla de todo? ¿Quién nos defenderá de tanto inepto?
Un Consell de Barri debe ser la oportunidad que tenemos los ciudadanos de poder tratar directamente con
los gobernantes los problemas de la gente, de nuestras calles, de nuestro
barrio.
No es un invento para que ellos se luzcan con discursos aburridos sobre la
participación en una plaza. Cuando aludiendo a la cortesía y el protocolo
municipal, no permiten el diálogo abierto para comentar cualquier tema y
problema. Lo urgente, necesario, práctico de un Consell es dialogar para
solucionar los problemas, no refugiarse en un protocolo absurdo para un Consell
de Barri, donde los ciudadanos cansados abandonan sus sillas después de dos
tediosas horas de escuchar y no hablar, arrepentidos de haber perdido el tiempo cuando podían hacer cosas mejores.
Debéis revisar el modelo, el orden del día, evitar discursos
infumables que nada aportan, no tiene sentido informar de cosas que sabemos por
Twitter o por el TOT, o enzarzarse en discusiones de “si no me has avisado para una reunión” eso que hacéis es seguir
matando la nueva política, eso es más de lo mismo y así no tenéis ningún
futuro.
No me extraña que la CUP suba como la espuma en La Floresta o
que Ciudadanos siga en su labor exitosa de oposición, aunque vaya a escuchar,
pero al menos hacen gestiones y se preocupan que Mirasol tenga el primer cajero
automático de su historia.
Vamos a seguir proponiendo ideas, sugerencias, reclamando la
limpieza de nuestras calles, ni más menos como se limpian las del Centro o la
de cualquier otro barrio de la ciudad. Y sobre todo vamos a seguir luchando
para eliminar el #PuntoNegro, para conseguir que las farolas iluminen la
entrada a nuestra bonita ciudad.
Y por sentirnos ciudadanos libres, rebeldes, nunca súbditos.
© El Gall crític, Sant Cugat, 3 de dicembre de 2015
Labels: Consell de Barri, Mirasol, Sant Cugat